FUNCIONES QUE DESEMPEÑA EL METILSULFONILMETANO EN EL ORGANISMO:
Propieda
des y efectos más conocidos:
Mejora la movilidad y normal funcionamiento de las articulaciones con resultados perceptibles en un par de semanas, por lo tanto es un nutriente seguro y compatible con los tratamientos usados tradicionalmente para combatir la artritis y la osteoartritis ya que actúa como antiinflamatorio y posibilita al organismo recuperar las células y las estructuras de tejido dañadas.
Mitiga el dolor en procesos inflamatorios en articulaciones, tendones, bolsa sinovial, disco intervertebral y otros muchos procesos musculares y del sistema motriz.
Ejerce un efecto protector de las mucosas (intestinal, respiratoria, urogenital, etc.) ante alergenos, parásitos y toxinas.
Combate el dolor crónico en la osteoartritis, artritis reumatoide, fracturas y bursitis.
Acción antioxidante:
Es un potente antioxidante capaz de conectarse e inactivar radicales libres "extras".
Los radicales libres no sólo no son nocivos para el cuerpo sino que son imprescindibles en la producción de energía.
El hígado produce radicales libres durante la descomposición de sustancias tóxicas y el sistema inmunológico del organismo los aprovecha para matar virus y bacterias. Sin embargo la superproducción de radicales libres puede ser perjudicial para la salud, y es ahí que entra la acción del MSM, combatiendo estos radicales libres "extras" que el cuerpo genera.
Efecto desintoxicante de metales pesados y otros CTP:
Disuelve muchos compuestos orgánicos e inorgánicos reaccionando con ellos, inativándolos y promoviendo su excreción. Por esta característica forma parte del paquete de quelación de metales pesados de la Dra. Clark.
Aumenta la permeabilidad de la membrana celular, haciendo más fácil la entrada de nutrientes en las células y al mismo tiempo incrementando drásticamente la habilidad de las células de excretar tóxicos y productos de deshecho.
Aplicación en enfermedades neurológicas:
El cerebro es extremadamente sensible a los efectos de materiales tóxicos y compuestos tóxicos persistentes.
Muchos de esos compuestos tienden a acumularse en las células y sistema nervioso.
Las enfermedades neurológicas como el Alzheimer y el Parkinson son suceptibles al tratamiento con MSM (como parte de un protocolo más amplio) puesto que es uno de los pocos antioxidantes que pueden atravesar la barrera hematoencefálica ejerciendo un efecto preventivo y reparador de los daños celulares (restaura la elasticidad de las células y permeabilidad su membranas).
